Busqueda

Búsqueda personalizada

martes, 1 de enero de 2013

Cae la tarde de este primer día del año




Al finalizar un año más, puedo reflexionar en mi soledad sobre todo lo vivido en el fallecido 2012; tantos recuerdos que trepan por las paredes y me hacen sonreír, tantas tristezas que me silencian, una antología de sentimientos con sus vaivenes, muchos sueños realizados, otros que se adelantaron para encontrarme en este 2013, aun así cae la tarde de este primer día del año, y mis manos no te pueden alcanzar, la distancia vuelve a ser nuestra mayor barrera, mis dedos aun extrañar dibujar la dulce silueta de tu fascinante cuerpo, aun el claroscuro es el fondo mas romántico para recordarte. Entonces comprendo que pronto debo ir hasta donde tu estas, hasta el centro de Suramérica, porque tú eres el tiempo que gobierna mi vida, porque mis días se miden con un primer beso tuyo al despertar y uno más profundo antes de dormir, porque estamos llenos de despedidas y reencuentros, y aunque este gobierno ineficiente nos haya provocado un nuevo distanciamiento, no podría impedir mis ansias de dormir una vez más entre tus brazos, no podría impedir que mi ser enamorado sucumba ante ti. Cae la tarde de este primer día del año, y mi meta es muy clara, hacer de tu piel mi mejor lugar para morar, y manteniéndome fielmente a mis votos matrimoniales, estar a tu lado aunque se nos encime la adversidad, amarte sin condición ni razonamientos, entregarme en ti vehementemente, volar a donde tu estas y permanecer en ti hasta que caiga la ultima tarde de mi vida.

Donativos

Patrocinantes